En una tensa Serie de Campeonato de la Liga Americana (ALCS), José Ramírez, el tercera base All-Star de los Guardianes de Cleveland, proporcionó un destello de esperanza con un jonrón en la novena entrada del Juego 2 en el Yankee Stadium.
Un Destello de Esperanza en Medio de la Derrota
Este jonrón, dirigido hacia el «porche corto» en el jardín derecho, marcó un momento significativo para Ramírez en la postemporada, aunque llegó cuando los Guardianes ya estaban perdiendo en el partido. En última instancia, Cleveland cayó ante los Yanquis de Nueva York con un marcador de 6-3, dejándolos en una desventaja abrumadora de 0-2 en la serie.
A pesar del jonrón, el rendimiento general de Ramírez en la postemporada ha generado preocupaciones, ya que ha luchado en el plato, bateando apenas .167 con solo cuatro hits en 24 turnos al bate.
Su desempeño con corredores en posición de anotar ha sido particularmente alarmante, ya que solo logró un hit en siete intentos, subrayando aún más su lucha para tener un impacto significativo en el éxito del equipo durante esta etapa crítica.
Regresando a casa al Progressive Field después de los decepcionantes juegos en Nueva York, los Guardianes mantuvieron un sentido de optimismo sobre sus posibilidades de cambiar el rumbo de la serie.
Presumían de un sólido récord en casa de 50-30 durante la temporada regular y se habían beneficiado previamente del entusiasmo de su afición en la Serie Divisional de la Liga Americana contra los Tigres de Detroit. El manager Stephen Vogt expresó su creencia de que, si bien ganar en el Yankee Stadium habría sido lo ideal, el equipo todavía se sentía bien acerca de su potencial para tener éxito en la serie.
Oportunidades Perdidas
En el Juego 2, los Guardianes tuvieron numerosas oportunidades de anotar, pero no lograron aprovecharlas, finalizando 0 de 7 con corredores en posición de anotar y dejando 11 corredores en base. Este fracaso para capitalizar las oportunidades de anotación resultó ser un factor crucial en su derrota.
Sin embargo, Vogt se mantuvo positivo sobre el enfoque del equipo, señalando que aplicaron presión constante sobre los Yanquis durante todo el juego. Aseguró a los aficionados que un solo juego en el que el equipo no pudo conseguir el gran hit no disminuiría su ánimo ni sus capacidades.
A medida que los Guardianes se preparan para el Juego 3, anunciaron planes para iniciar al lanzador zurdo Matthew Boyd contra Clarke Schmidt de los Yanquis, con la esperanza de un resultado más favorable.
Boyd, ahora compañero de equipo de Ramírez, compartió su admiración por el tercera base, recordando sus encuentros previos durante el tiempo de Boyd con los Tigres de Detroit. Elogió a Ramírez por su disposición para jugar y su combinación de velocidad y poder, enfatizando las cualidades de liderazgo que lo convierten en un componente vital de la alineación de los Guardianes.
Boyd describió a Ramírez como un «jugador de verdad», destacando su importancia en situaciones de alta presión.
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— Betcris (@Betcris) October 17, 2024
Excelente Estado de Nueva York
Mientras tanto, los Yanquis vieron una actuación fundamental de Aaron Judge, quien conectó un jonrón crucial en la séptima entrada del Juego 2. Este jonrón marcó el primer jonrón de Judge en la postemporada de este año, sellando la victoria para Nueva York y proporcionando un impulso muy necesario después de un inicio de playoffs lento.
Antes de este hit, Judge había luchado, registrando solo dos hits en 17 turnos al bate y recibiendo seis bases por bolas. Después del juego, expresó una mezcla de alegría y alivio, atribuyendo humorísticamente su éxito a los «fantasmas» del Yankee Stadium, marcando su decimocuarto jonrón de postemporada en solo su quincuagésimo partido de postemporada.
Además, el regreso inesperado de Anthony Rizzo a la plantilla de los Yanquis para la ALCS fue un desarrollo notable. A pesar de haber fracturado dos dedos de su mano derecha, Rizzo jugó un papel significativo en el Juego 2, bateando 2 de 4 con un doble y anotando una carrera.
Su actuación fue particularmente impresionante dado que no había jugado en la serie anterior contra Houston. Rizzo reportó algo de dolor en sus dedos, pero indicó que se sentía mejor de lo que había estado después del Juego 1, acreditando su mejoría a un tratamiento extensivo.
A medida que avanza la ALCS, los Guardianes deben encontrar la manera de recuperar su posición y aprovechar sus fortalezas en casa, mientras que los Yanquis buscan capitalizar su impulso de los éxitos recientes, incluidas las contribuciones de jugadores clave como Judge y Rizzo.
