El Highmark Stadium será testigo de un nuevo capítulo en la rivalidad entre Bills de Buffalo y Patriots de New England. Ambos llegan con realidades diferentes: los Bills lideran invictos en la AFC Este, mientras que los Patriots intentan mantener el ritmo tras un inicio irregular. El ambiente promete ser eléctrico en un Sunday Night Football decisivo para la división.
Bills de Buffalo: Un Equipo Que Luce Imparable
Buffalo atraviesa un momento estelar. Su ofensiva está promediando más de 33 puntos por partido y su defensa limita a los rivales a poco más de 22, un balance que los coloca como uno de los conjuntos más completos de la NFL. El motor de este rendimiento sigue siendo Josh Allen, capaz de dominar tanto por aire como por tierra y que cada semana reafirma su estatus de estrella.
El ataque no depende únicamente de Allen. James Cook ha transformado el juego terrestre de Buffalo en un arma letal, con múltiples partidos superando las 100 yardas. Su racha anotadora lo convierte en un jugador clave que abre espacios para receptores como Keon Coleman y Khalil Shakir, quienes lideran la producción aérea junto a las contribuciones de Dawson Knox y Dalton Kincaid desde la posición de ala cerrada.
En defensa, la ausencia de Ed Oliver se ha notado, pero la línea sigue siendo una de las más físicas de la liga con Rousseau y la experiencia de Joey Bosa. El regreso de Matt Milano refuerza el centro del campo, vital para presionar a un mariscal novato como Drake Maye.
Patriots de New England: La Prueba Más Dura Para Maye
Los Patriots han mostrado altibajos, con dos victorias y dos derrotas. La ofensiva promedia 27 puntos por juego, suficiente para mantenerse competitivos, pero esta semana enfrentarán una de las defensas más sólidas contra el pase.
Drake Maye ha sido la gran noticia en New England. Con un 74% de efectividad en sus envíos, lidera la NFL en ese apartado y se ha ganado la confianza de sus compañeros. Sin embargo, enfrentarse a una secundaria que solo permite 125 yardas aéreas por juego será su examen más complicado hasta ahora.
El posible camino para los Patriots está en el ataque terrestre. Con Henderson y Stevenson, el equipo puede aprovechar que Buffalo ha tenido problemas contra la carrera, permitiendo más de 160 yardas por encuentro. Si logran establecer el ritmo en tierra, podrían equilibrar el juego y mantener a Allen más tiempo fuera del campo.
Comparativa de Estadísticas
Ambos llegan en buena forma, pero las cifras muestran un dominio más claro de Buffalo, tanto en ataque como en defensa.
Equipo | Récord | Promedio de puntos | Yardas terrestres | Yardas aéreas permitidas | Último resultado |
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Buffalo Bills | 4-0 | 33.3 por juego | 163.5 por partido | 125.8 por partido | 31-19 vs Saints |
New England Patriots | 2-2 | 27.3 por juego | 110 por partido | 210 por partido | 42-13 vs Panthers |
Pronóstico Final
El duelo tiene todos los ingredientes de un clásico divisional: rivalidad, talento joven y estrellas consolidadas. Los Patriots vienen motivados tras una gran victoria, pero medirse con un rival como los Bills será una tarea muy distinta. La clave estará en cómo gestione Maye la presión de la defensa rival y si New England consigue correr el balón con efectividad.
Sin embargo, la solidez ofensiva y defensiva de Buffalo, sumada al apoyo de su estadio, hace difícil apostar en contra de ellos. Josh Allen está en un nivel de confianza total y el ataque terrestre añade un equilibrio que lo convierte en una amenaza completa.
Pronóstico: Victoria de Buffalo, con un marcador probable de 30-20.